Pues sí, hace tanto que no escribimos que los canijos ya han cumplido 9 meses. Pesan casi casi 9 kilos y están para comérselos! Pero ahora, que no paran, sí que notamos que son dos...aún estamos buscando dónde poder quitarles las pilas...aunque solo sea un ratito.
Han aprendido a hacer muchas cosas:
- Gateo. Marcos le saca a Sergio una semana de práctica y se nota. Corre que se las pela!
- Motricidad fina. Dan palmitas, lo cogen todo, mueven las muñequitas como si condujeran...juegan mucho con sus manitas.
- Equilibrio. Ya se ponen de pie apoyándose en todo lo que encuentran, aunque aún no se mantienen mucho. Por eso les dejamos jugando en la habitación tan chuli que les hemos montado, porque ahí está todo a prueba de gemelos...al menos de momento, y podemos estar tranquilos mientras juegan y escuchan música.
- Habla. Ya dicen mucho papa, mama, tata, aunque aún no con intención. Sergiote cuando llora le da una entonación y le mete unas sílabitas lastimeras como si te contara el por qué de su llanto (pa' morderle!)
- Perseguir a Marisol. Aún están en ello, aunque no le quitan ojo, Mari todavía es más rápida y sabe cómo quitarse de en medio. Pero algún enganchón ya se ha llevado...esperamos que no se lleven mal.
Gracias a la guarde, donde son los reyes del mambo, aprenden mucho y muy deprisa. Y nosotros con ellos!
Salvo algunas manías que han cogido recientemente, como no querer tomar la leche en bibe y sí con cuchara, comen bastante bien. Les encantan los purés, la fruta y las galletas, aunque son como Triki y acaba más galleta fuera que dentro de la boca.
Han disfrutado de las Navidades mucho más de lo que pensábamos, con los regalos y las reuniones familiares. Aunque el árbol les daba un poco de miedo, se lo han pasado pipa.
A ver si volvemos a coger costumbre de actualizar, porque ahora sí que vamos teniendo más cosas que contar con estos dos. No paran!
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